Si estás leyendo esta nota es porque estás interesado en emprender alguna idea de negocio. Pues, si es así, necesitas un plan de mercadeo o un plan de negocios, aunque tu proyecto esté siendo financiado por ti mismo, por amigos o familiares.
Un plan de negocios no se hace solo porque necesites recaudar los fondos para tu inversión. De hecho, un plan de negocios es mucho más que eso: es una herramienta para entender cómo se está armando tu negocio. Si no tienes uno, no serás capaz de monitorear el progreso o controlar el destino del negocio.
Por ejemplo, primero haces una investigación de mercado. Esto es lo más crucial, así vas a saber qué quiere tu consumidor y cómo vas a satisfacer esa necesidad. Por lo tanto, escribir tu plan de negocios te obliga a revisar todo a la vez: tu propuesta, tus suposiciones de mercadeo, tu plan de operaciones, tu plan financiero y tu plan de personal. Terminarás encontrando conexiones importantes que de otra manera hubieras perdido.
Otro ejemplo, si tienes un plan de mercadeo para conseguir 20 mil clientes para el segundo año de operaciones y tu plan de personal prevé solo dos vendedores, eso te obliga a preguntarte: ¿Cómo voy a llegar a tener 20mil clientes con solo dos vendedores? La respuesta podría sugerir que formes asociaciones, y te concentres en planear tus mejores estrategias, ya que vas a necesitar ejecutar exitosamente el proceso de distribución de tus productos, por lo que tendrás que contratar empresas especializadas en esas funciones.
En otras palabras, tu plan de mercadeo debería definir la información clave de tu negocio, incluyendo tu misión, tus objetivos; así como también las tácticas y los pasos necesarios para conseguir más clientes y aumentar tus ventas.
Definiendo los objetivos de tu plan de mercadeo
¿Te has preguntado por qué tu negocio no despega? No importa lo que hagas, no importa cuánto te esfuerces, estás siempre en más y más dificultades.
La primera parte de tu plan de mercado debe cubrir en qué posición se encuentra tu empresa y tu oferta de productos y servicios.
Sea el negocio que sea, necesitas planificar. Al principio tienes que tener tus objetivos claros, así como la visión y misión del negocio que vas a emprender. Así podrás calcular la inversión inicial, costos, beneficios, etc. Como te decía anteriormente, el plan de negocios contiene gran información y puede responder a muchas preguntas que te harás como emprendedor.
Además, el historial escrito de tus objetivos, junto con un historial de cumplimiento de estos, envía un mensaje alto y claro: usted sabe lo que está haciendo y puede entregar los resultados que promete. Todos responderán positivamente a ese mensaje (bancos, cooperativas que apoyan a Pymes, inversionistas…, etc).
Así que, antes de decidir saltarse la fase de planificación, considera todas las implicaciones y lo que significa para tu éxito futuro.
En resumen, un plan de negocios te ayudará a:
-Establecer objetivos claros, por lo que tendrás una mejor gestión de tu negocio.
-Te permite discutir tus estrategias con anticipación con tus socios, esposa o familiar emprendedor.
– Podrás decidir si puedes alquilar o no un espacio, ya que irás monitoreando cómo crece tu negocio y sabrás si puedes asumir o no compromisos.
– Contratar nuevo personal o no.
– Te da poder de decisión, si necesitas invertir o no a corto o a largo plazo.
– Puedes expresar más clara tus ideas a tus socios o empleados.
– Podrás desarrollar nuevas alianzas comerciales.
– Las personas con las que hagas negocio te verán como un profesional.
– Podrás vender mucho mejor la idea de cuánto vale tu negocio.
– Podrás expandir tu empresa.
Como última recomendación, te aconsejo que tengas una página web con la información básica de tu empresa, detalles como la dirección, tus productos y servicios que ofreces, cómo llegar (ahora es fácil incluir un mapa para llegar en tu sitio web), el horario, tu teléfono para contactarte, y podrás alimentar a tu audiencia con artículos informativos de interés.